La creación de personajes en Baldur’s Gate 3 consiste en tomar decisiones y hacer frente a las repercusiones de esas decisiones. Todos los personajes del juego son libres de cambiar de clase en cuanto suban de nivel por primera vez.
La multiclase presenta posibilidades muy interesantes, pero construir una estructura multiclase sólida está plagado de riesgos, la mayoría de los cuales pasan desapercibidos. Entonces, ¿deberían todos los viajeros intrépidos considerar la multiclase como una opción viable? Vamos a investigar.
En Baldur’s Gate 3, ¿deberías hacer multiclase?
Baldur’s Gate 3 elimina los requisitos de puntuación de habilidad para añadir una nueva clase a la inicial, ya que funciona de forma ligeramente diferente a la clase D & D 5e de mesa. Así, por ejemplo, no tendréis que preocuparos por conseguir una puntuación de carisma específica cuando alcancéis el nivel 2 de la clase inicial para convertiros en el brujo de combate. Gracias a ello, tendremos acceso a numerosas opciones de personalización desde el principio del juego, que tendremos que gestionar para aprovechar al máximo su potencial.
Los puntajes de habilidad siguen siendo importantes, aunque la multiclase no los requiera. Cualquier hechizo que lances no será tan efectivo como si lo hubiera lanzado un brujo puro, ya que las principales características de la clase de luchador son la fuerza para las configuraciones cuerpo a cuerpo o la destreza para las configuraciones a distancia, mientras que el carisma es la estadística de la clase de brujo. Por eso, para crear un personaje eficaz cuando intentes jugar en multiclase, ten en cuenta estas consideraciones. Hacer multiclase con la clase Pícaro sería una opción mucho mejor que elegir al luchador, que está equipado con una gran destreza para el combate a distancia. Para dar otro ejemplo, un luchador fuerte se mezcla bien con la clase bárbara.
¿Deberíais hacer multiclase alguna vez en Baldur’s Gate 3 a pesar de que todo esto suena atractivo dadas las oportunidades que presenta? No, la verdad es que no, es la respuesta. Al hacer varias clases, corres el riesgo de perder algunas habilidades fuertes por otras menos útiles, ya que impide que tus personajes alcancen todo su potencial en la clase inicial. Si utilizas la mecánica del juego, planificas tus movimientos en consecuencia y nunca te lanzas a una batalla sin estar preparado, ni siquiera en el nivel de dificultad táctico, no necesitarás usar varias clases.
Sin embargo, si te gusta Dungeons & Dragons y tienes una buena idea de lo que es capaz cada clase, no cabe duda de que deberías hacer multiclase en Baldur’s Gate 3, ya que hay algunas combinaciones poco comunes que resultan sorprendentemente eficaces. Hablar con Withers de tu lado y respetarlo te ayudará a corregir cualquier error que creas haber cometido, y así podrás experimentar sin preocuparte por los resultados.
