Según los informes, Sega debatió lanzar una versión de Dreamcast Mini, pero finalmente decidió no hacerlo por problemas de costo y calidad.
En un video reciente de YouTube sobre la Sega Saturn Mini y la consola, el YouTuber y experto en juegos retro Adam Koralik declaró, al menos, eso es lo que dijo. Como la mayoría de ustedes saben, solía haber una tendencia en el lanzamiento de versiones mini de consolas antiguas, con Sony lanzando la PlayStation Classic además de Sega y las NES y SNES Mini de Nintendo. Sin embargo, Sega no se detuvo ahí; el año pasado, se presentó la Genesis Mini 2 como la última versión de Nintendo y Sony. Entonces, ¿qué le impidió a Sega lanzar una versión mini de su popular consola, que se considera su mejor consola y se llama Sego Dreamcast? Tecnología, por decirlo brevemente. El vídeo con la marca de tiempo se proporciona a continuación:
El YouTuber habla sobre las consolas de Sega y cómo colaboró con la compañía en el relanzamiento de Shenmue en Koralik. Lo más probable es que se refiera al relanzamiento de los primeros juegos de Shenmue para PC y consola en 2018. El gurú de los juegos retro afirma que, en lugar de lanzar esos juegos a través de una versión mini de Dreamcast, estaba hablando con Sega sobre la posibilidad de hacer varios relanzamientos digitales de Dreamcaster. Sega respondió que una miniconsola sería demasiado cara después de que Koralik le preguntara por el problema de la versión Mini de la consola. En el vídeo, comenta: «Si queremos lanzarla como consola, nos costará alrededor de 300 dólares, ya que tendremos que incorporar un hardware auténtico y la tecnología no es todavía lo suficientemente barata como para hacerlo». «El precio de 300 dólares no satisfaría a nadie. Todos se pondrían furiosos porque esperaban 100 dólares.
Según se informa, Sega consideró lanzar una versión en miniatura de los juegos de Dreamcast para PC, pero al público en general no pareció gustarle. Koralik continuó: «Puedes comprar uno barato y asequible que no sea un gran producto, o te quedas con el producto que no es asequible». Por lo tanto, no se ha hecho público.
Si este es el caso, podemos entender la perspectiva de Sega. Dado que la Dreamcast fue la última consola que lanzó la compañía japonesa, sus ventas finalmente no estuvieron a la altura de las expectativas de Sega. Podemos imaginarnos a los fanáticos queriendo una versión mini que cueste más que la consola original porque el bombo publicitario de las miniconsolas disminuyó rápidamente.
