La próxima GPU tope de gama de NVIDIA usará una interfaz de 512 bits

La próxima GPU tope de gama de NVIDIA usará una interfaz de 512 bits


Según los últimos rumores, NVIDIA lanzará su primera gráfica gaming tope de gama con una interfaz de memoria 512 bits. Eso sí, para verla aún tendrás que esperar. En concreto, se indica que esta GPU tope de gama pertenecerá a su próxima generación de GPUs, la cual se espera que llegue en el 2025. Esto al menos es lo que afirman los últimos rumores. Si la información se cumple, sería la primera vez que la empresa de Jensen Huang utiliza un chip con dicho bus de memoria en chips GDDR enfocados al segmento gaming.

Y es que la primera vez que vimos emplear una interfaz de 512 bits en una GPU fue basada en el chip gráfico ATI R600. En concreto, en una ATI Radeon HD 2900 XT lanzadas en el año 2007. De esta forma, ha llovido bastante desde que AMD debutó en los 512 bits, y lo que tardará en hacerlo NVIDIA.

La próxima GPU NVIDIA tope de gama tendrá un bus de 512 bits

A través de @Kopite7Kimi, uno de los filtradores de información de NVIDIA más fiables, se ha podido saber una información clave de la próxima generación de GPUs de NVIDIA. Y es que, por lo visto, el próximo chip tope de gama, el cual no veremos hasta 2025, va a ser tener un tamaño. ¿El motivo? La interfaz de memoria del chip más potente de las Ada-Next. También conocidas como Blackwell, van a tener un bus de memoria de 512 bits. Lo cual se traduce en que la periferia del chip será mucho más grande. Por ahora se espera que supere sin problemas los 600 mm² de área del actual chip AD102 que da vida a la RTX 4090.

Todo ello significa varias cosas. Para empezar una relación directa entre la cantidad de caché y el ancho de la interfaz de memoria, pues veremos un aumento de la misma. No sabemos si en tamaño, pero al menos en el número de particiones. No podemos asumir que habrá más memoria, ya que NVIDIA podría hacer como AMD con las RX 7000 y recortar la cantidad de caché de último nivel por controlador de memoria y poder mantener así la GPU en un tamaño adecuado para su fabricación en masa.

En cuanto al tipo de memoria utilizada con el bus de 512 bits, todo apunta a que, dado que todavía faltan dos años, podría ser la GDDR7. Este memoria podrá alcanzar una velocidad de hasta 36 Gbps. Aunque desconocemos la velocidad con la que se implementaría en la próxima tarjeta gráfica tope de gama de NVIDIA. En todo caso, y en el mejor de los casos, estamos hablando de un salto en el ancho de banda de 1.008 GB/s a 2.304 GB/s. Sin embargo, no descartéis que los de Jensen Huang usen memorias más lentas. Tras la serie GeForce RTX 40, ya nada nos sorprendería.

Más ancho de banda para una tarjeta gráfica enorme

Por el momento desconocemos su potencial, pero si escalamos desde las RTX 4090 nos podemos hacer una idea del nivel de potencia de cálculo que nos podemos encontrar. En el actual chip AD102 tenemos 12 GPC para un bus de 384 bits, cada uno de ellos tiene físicamente 12 SM para un total de 144. Si bien las RTX 4090 no tienen acceso a todos los núcleos, tarjetas profesionales como la A6000 sí. Pues bien, si NVIDIA no cambia la configuración de los SM en su RTX, entonces estaríamos hablando de una configuración máxima podría llegar a los 192 SM en total, lo que puesto en «núcleos» CUDA serían 24.576 en total.

Otro de los cambios sería en cuanto a la cantidad de chips de memoria. A no ser que con la memoria GDDR7 sean de 64 bits por chip, deberíamos esperarnos a ver configuraciones de 16 chips soldados en el PCB. Por lo que estamos hablando de una tarjeta gráfica vendría a ser masiva, y si la RTX 4090 os parece enorme, la RTX 5090 lo será aún más. Aun queda mucho tiempo por delante, así que esta información se irá confirmando o desmintiendo con el paso del tiempo.

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