Los legisladores estadounidenses están trabajando para aprobar la expansión de la tecnología «RISC – V», ampliamente utilizada en China, en respuesta a los «impactantes» avances tecnológicos en China.
A la luz de los recientes avances en la industria tecnológica del rival, a los Estados Unidos les preocupa la transferencia de tecnología a China
A continuación se proporciona una descripción general de la arquitectura RISC-V. Es un estándar de código abierto que se utiliza principalmente como la «columna vertebral» de chips y semiconductores de última generación. Tras la introducción del SoC Kirin 9000S de Huawei, al que se considera esencial para lograr ese rendimiento, la adopción de esta arquitectura ha crecido recientemente de forma significativa en los mercados chinos. Sin embargo, los Estados Unidos se han dado cuenta de que la «transferencia de tecnología» a la industria china ha sido rápida, por lo que los legisladores están tomando medidas para impedir el desarrollo del RISC – V.
The CCP (Chinese Communist Party) is abusing RISC-V to get around U.S. dominance of the intellectual property needed to design chips. U.S. persons should not be supporting a PRC tech transfer strategy that serves to degrade U.S. export control laws.
-Representative Michael McCaul via Reuters
Los senadores Marco Rubio y Mark Warner, dos de los principales legisladores involucrados en el proceso, están preocupados por una posible «reactivación de la tecnología china», especialmente en lo que respecta al avance interno chino con la tecnología RISC-V. Dado que empresas como Huawei, ZTE y Alibaba están liderando la implementación de la arquitectura RISC-V en sus diseños locales, el predominio de los representantes chinos en la «Fundación Internacional RISC-V» es un excelente ejemplo de lo que preocupa a los Estados Unidos.
No cabe duda de que Estados Unidos tendrá un impacto negativo en la industria mundial, aunque aún no haya adoptado medidas oficiales. A juzgar por la «prolongada» historia de sanciones tecnológicas de los Estados Unidos contra China, resulta evidente que los países afectados han encontrado la forma de «eludirlas», ya sea mediante soluciones internas o recurriendo a intermediarios externos. Dado que se ha revelado que Rusia tiene la intención de desarrollar un superordenador basado en las GPU H100 AI de Nvidia, que están «oficialmente» fuera del alcance del país, los informes de los medios de comunicación rusos respaldarán mi afirmación a este respecto.
Los acuerdos comerciales entre EE. UU. y China han tenido un gran impacto en las empresas tecnológicas, especialmente en aquellas que, como NVIDIA e Intel, tienen más clientela en China. Los legisladores estadounidenses se ven obligados a cambiar sus políticas porque, a pesar de que Estados Unidos ha compensado este negocio con leyes como la «Ley CHIPS», todavía no tiene un impacto «profundo».
