En una llamada de financiación, Intel ha indicado que la empresa no presentará una nueva serie de procesadores de escritorio este año. Si quieres novedades, tendrás que esperar hasta 2026 con la llegada de Nova Lake… Por un lado, es una lástima, por otro lado, esto permitirá un salto generacional más importante. Por otro lado, Panther Lake todavía está previsto para este año.
¡Sin nuevos CPU de escritorio en 2025 para Intel!
En líneas generales, el año 2025 parece que será bastante pobre en novedades por parte de Intel. Claro, la empresa reserva Panther Lake para este año, de hecho, las cosas parecen estar avanzando bien y un lanzamiento sigue previsto para el segundo semestre del año. Aquí se habla de un procesador que utiliza el proceso 18A. Con esta serie, la marca apunta al sector de portátiles. Además, no todo el procesador será producido por Intel, no, el 70% vendría de las fundiciones de la marca mientras que el resto provendría de fuentes externas, especialmente se piensa en TSMC.
Por otro lado, en el ámbito de los servidores, hemos sabido que la empresa ha cancelado Falcon Shores, el sucesor de Gaudi 3 para el sector de la IA. En cuanto a Clearwater Forest, el lanzamiento se ha pospuesto hasta 2026. Además, es mejor eso que un lanzamiento precipitado decepcionante, ¡especialmente en este sector!
Por último, llegamos al tema que nos interesa: Nova Lake, la próxima generación de procesadores destinada al sector de escritorio. Aquí se habla de un lanzamiento previsto para el año 2026, por lo que no habrá una serie de actualización. Sin embargo, este anuncio plantea algunas preocupaciones sobre las placas base actuales ya que no se ha mencionado nada sobre su compatibilidad con esta próxima generación de CPU. De lo contrario, esta generación podría beneficiarse en gran medida de una producción interna a través de un proceso en 14A si todo va bien.
Por último, parece (según rumores) que el IMC (controlador de memoria) sigue separado del chip de cálculo… Pero los azules están trabajando en optimizaciones para reducir la latencia de memoria, lo que afecta seriamente el rendimiento de Arrow Lake actualmente, especialmente en juegos.
