Cuando tuvimos la oportunidad de descubrir la MSI Claw en el CES 2024, pudimos sostenerla en nuestras manos sin realmente hacernos una idea del rendimiento de esta nueva consola. Pero este primer contacto, simplemente “físico”, nos permitió notar que la consola de MSI tenía sus ventajas, especialmente en términos de ergonomía. Si la elección de Intel había sorprendido a los “especialistas”, el estudio, bastante simple de la hoja de ruta de los azules, permitía entender por qué MSI se posicionaba de esa manera y no, como todos los demás, con AMD. Sin embargo, las procajas transiciones lideradas por Intel dejaban entrever que el hardware elegido requeriría paciencia, como se deja madurar un buen vino. Pero ¿cómo considerar una posición así cuando se ingresa en un mercado donde el objetivo es el jugador dedicado? Un público que en general se preocupa poco por el hardware siempre y cuando le brinde lo que busca: ¿FPS? La elección de MSI para su lanzamiento fue, lógicamente (desafortunadamente), apoyarse en influencers, youtubers, medios de comunicación mainstream de este público gamer… El resultado estaba escrito de antemano: la MSI Claw recibió críticas. Decir que es injustificado sería, no obstante, deshonesto, la Claw estaba detrás de su competidora Asus, a menudo incluso de manera bastante marcada. Pero algunos puntos de contexto y explicaciones seguramente habrían permitido a la marca explicar a dónde quería llegar y matizar las críticas…
MSI apuesta por la hoja de ruta de Intel para sus consolas
Últimamente se ha hablado mucho de Intel, no es necesario volver sobre el tema. Sin embargo, una vez que la espuma se ha ido, el plan trazado por los azules es impresionante. Está lleno de promesas para el mundo de la PC y en particular para la movilidad. Meteor Lake, que equipa la Claw, ya es una revolución considerable. Su parte gráfica, basada en Arc Alchemist, es un gran avance. Sin embargo, al igual que las tarjetas de escritorio ARC, sufrió numerosos sobresaltos durante el final de su desarrollo, especialmente en lo que respecta a sus controladores. Esto es un tema importante porque si sigues las noticias relacionadas con ARC, habrás notado que las mejoras cada nueva actualización son espectaculares. En las últimas semanas hemos tenido la oportunidad de volver a probar una MSI Claw, aplicándole todas las actualizaciones proporcionadas por Intel y también MSI. Y hay que decirlo de inmediato, ya no es la misma consola.
Las actualizaciones transforman realmente la MSI Claw
Las comparaciones de la MSI Claw con su principal competidora no eran halagüeñas hasta ahora. No solo el Claw tenía un rendimiento inferior en las primeras pruebas, sino que el consumo de energía también era peor en comparación con el Z1 Extreme de AMD. A partir del segundo trimestre de este año, MSI e Intel intensificaron las actualizaciones. Las cosas se hicieron en dos etapas. Primero en abril, cuando los nuevos controladores de Intel permitieron una mejora global de rendimiento entre el 4 y el 40 %. Luego MSI también ofreció una actualización procaja del firmware de su Claw, permitiendo ganar casi un 30 % adicional. Según MSI, con estas mejoras, la Claw sería ahora un 26 % más rápida que la ROG Ally. Tuvimos la oportunidad de volver a probar una MSI Claw (equipada con el procesador Core Ultra 7 155H) para investigar la situación.
Nuestros tests sintéticos y experiencia
Pudimos realizar una serie de pruebas para comparar la Claw, una vez realizadas todas las actualizaciones, con la Rog Ally equipada con el AMD Z1 Extreme. Aunque no pudimos llevar nuestras pruebas al límite, confirmamos los grandes avances de la consola MSI. Las pruebas sintéticas son claras y los pocos juegos probados dan indicaciones. Sin embargo, la tendencia no se confirma en todas partes.
Para esta rápida prueba, utilizamos la Claw en todos los modos que ofrece. Los números de comparación se extrajeron de nuestra prueba de la Rog Ally Z1 Extreme.
Los pocos juegos probados en las mismas condiciones que la Rog Ally Z1 Extreme:
MSI se renueva con estas actualizaciones y prepara su segunda generación
No pretendemos decir que estas medidas tengan el valor de una prueba a gran escala. Pero sin embargo, son reveladoras de la evolución y de la mejora significativa de rendimiento que MSI buscó para reinsertar su Claw en la competencia. Pero todo esto es desde el punto de vista técnico y de entendimiento. Asus eligió construir sus consolas con los APU AMD, probados durante años. MSI se arriesgó lanzándose con Intel. Comercialmente, probablemente ha fallado hasta ahora. Aunque la Claw ahora es competitiva frente a la Rog Ally, su lanzamiento no fue el que la marca esperaba. MSI ha reducido sus precios, pero Asus también lo ha hecho.
Sin embargo, la segunda mitad del partido se jugará en unas pocas semanas. Asus ha evolucionado su Rog Ally pero tendrá que lidiar al menos hasta 2025 con el mismo hardware AMD. MSI debería presentar una segunda versión equipada del muy prometedor SoC Intel Lunar Lake, que llega a principios de septiembre. Su parte gráfica debería ser considerablemente superior, pero la solución de Intel también podría marcar la diferencia en cuanto a autonomía. Parece que Intel y MSI se han acercado considerablemente para esta categoría de “consolas PC”. El objetivo de Intel es ofrecer en los próximos meses SoC x86 muy eficientes pero también muy potentes en términos de potencia gráfica.
Por tanto, con esta esperanza, MSI podrá revivir y mantenerse en la cima a finales de 2024… si el último lanzamiento de Intel confirma todas las promesas vistas.