Los planes de los EE.UU. para convertirse en la primera potencia en el mundo de los semiconductores podrían quedarse en agua de borrajas. Curiosamente, no será por ninguna contramedida de China ni nada por el estilo, sino por el hecho que se van a encontrar con una falta de profesionales cualificados para los próximos años. En concreto, se estima que sufrirá un déficit de 67.000 profesionales en la industria de chips. ¿De dónde provienen esas cifras? ¿Por qué los Estados Unidos sufrirá para contratar empleados en la industria de los chips?
El plan de los Estados Unidos para convertirse en la primera potencia mundial en la fabricación de chips podría tener un punto débil muy importante. La falta de personas lo suficientemente preparadas y, por tanto, cualificadas en el país. Y es que todo apunta a que tendrán problemas para contratar empleados en la industria de la fabricación de chips. Y no precisamente por falta de capacidad económica.
EE.UU. sufrirá para contratar los 67.000 empleados que necesitarán en 2030
Resulta obvio que, si hablamos del mercado de los semiconductores, es decir, el diseño y la fabricación de chips, el proceso por parte de los Estados Unidos en la actualidad es claro. Y es que la globalización se está revirtiendo en una regionalización en el que el objetivo es que las diferentes piezas se fabriquen en el suelo de la mayor potencia económica del mundo. Sin embargo, esto es algo que no solo se consigue con recursos económicos, ya que el potencial humano es igual o más importantes.
El “Chips and Science Act of 2022” busca que la nación liderada por Joe Biden se convierta en el mayor productor de chips del mundo. Sin embargo, todo el proceso de creación de un chip requiere de gente cualificada. Y no poca gente precisamente, ya que se estima que los EE.UU. echarán en falta 67.000 profesionales altamente cualificados para 2030. Cantidad que viene de una estimación hecha por la Asociación de la Industria de Semiconductores (SIA).
Precisamente, según dicho organismo, se espera que la fuerza de trabajo en los EE.UU. experimente un aumento entre las 345.000 y 460.000 contrataciones en 2023 si se mantiene el crecimiento actual. La realidad es que a la velocidad en la que las personas están terminando sus estudios universitarios en dicho país, al menos 67.000 vacantes de esas vacantes terminarán por verse vacías. Esto se traduce en que un 58% de las mismas no se podrán cubrir con personal estadounidense. Y todo por el hecho de no tener personal cualificado con carreras de ciencias, ingeniería y especialmente matemáticas.
Una guerra por los mejores talentos del mundo en chips
Todo ello significa que los Estados Unidos entrarán en una guerra por conseguir los mejores profesionales de los diferentes campos y atraerlos a su país. El resto de naciones deberán hacer todo lo posible para retener a sus talentos más capacitados en las diferentes áreas. Y es que tener personal altamente cualificado no es fácil, aquí no es solo la capacidad de cada individuo, sino la del sistema educativo de cada país para sacar lo mejor de cada uno. Por desgracia, muchos se quedan a medio camino y esto provoca que los pocos profesionales bien cualificados se conviertan en un recurso escaso.
Es decir, el llamado “Chips and Science Act” es la típica maniobra política basada en aprobar presupuestos y dejar dinero sin tener en cuenta el resto de elementos que hacen posible un plan industrial tan ambicioso. Un brindis al sol por parte de los Estados Unidos que se puede quedar en nada por no tener en cuenta algo tan importante como es el personal que haría posible el crecimiento que esperan para convertirse en la primera potencia en lo que al diseño y fabricación de chips se refiere. Y es que 67.000 profesionales cualificados no brotan de la nada.
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